Saudade
“No hay nostalgia peor que añorar lo que nunca jamás sucedió.” ¿Os he contado las tres veces que estuve en Lisboa? La primera fue un despropósito, como todo en mi matrimonio; aquello parecía una gincana para ver cuántos barrios éramos capaces de visitar en el menor tiempo posible, algo, sin duda, contrario al alma lusitana. Yo no daba crédito. La segunda vez, dejado reposar el divorcio, nos fuimos una amiga y yo y descubrimos una Lisboa a la medida de nuestros pasos y de nuestro bolsillo, fue poco tiempo, como todas mis visitas a Lisboa, pero agradecido y cumplido. Hacía falta un desagravio y dimos buena cuenta de él; especial mención al barrio de Alfama, a sus humildes sardinas y a sus cantaores de Fados por un desayuno. La tercera vez fue un viaje organizado donde además de Lisboa, visitábamos Coimbra. Ya Lisboa estaba gentrificada, ambos tratábamos de visitar los lugares que habían quedado fijos en nuestra retina con anterioridad, aunque sí apareció el Chiad...